El Mercurio
La obra dirigida por Eduardo Yedro subirá a escena el próximo 4 de abril, en el Teatro Municipal de Las Condes. Tendrá un mes de funciones.
Por Eduardo Miranda
En escena, una veintena de artistas comienza la coreografía, mientras de fondo suena un teclado eléctrico que marca el ritmo del coro: "Money, money, money. Es dinero para ser feliz", cantan todos, mientras al centro está la actriz Annie Murath, quien encarna a Donna, la protagonista del musical "Mamma mia!".
Las canciones del grupo sueco Abba han sido traducidas al castellano para esta versión, tal como ocurrió en las producciones de México y España. "Yo recuerdo en mi adolescencia haber escuchado en la radio algunas canciones de Abba en castellano. Lo importante aquí es que la traducción no hace perder la esencia melódica", dice la intérprete, quien no ve inconvenientes en hacer una entrega del musical en español.
La producción con libreto de Catherine Johnson y canciones del grupo sueco Abba se estrenará el próximo 4 de abril, en el Teatro Municipal de Las Condes y por estos días la compañía afina los últimos detalles antes de subir al escenario. El elenco, compuesto por 25 artistas, ensaya toda la semana en los estudios de Canal 13 -que también participa como colaborador del montaje- y además han tenido que tomar clases de canto y baile. El director Eduardo Yedro complementa: "Hicimos una traducción propia de estas canciones que son muy conocidas por la gente, pero que en esta oportunidad están al servicio de la historia teatral".
Cada jornada se convoca a productores, asistentes, músicos, fotógrafos y diseñadores. "En las primeras dos semanas, la obra ya estaba lista. Ahora viene el acto de subirse el escenario para ensamblarlo todo", dice Murath, quien luce el pelo ondulado y una jardinera, tal como lo exige la producción de Music Theatre International, de acuerdo con las características del montaje original. Junto a ella están Josefina Montané, Álvaro Gómez, Felipe Contreras, Andrés Zará y Lorene Prieto, entre otros.
"Las tres disciplinas que confluyen en el musical están bien marcadas: la actuación, la música y el baile tienen el mismo protagonismo", dice el director, y finaliza: "Eso ha sido lo más complejo de este musical, que se diferencia bastante de otros que ya había realizado -"Cats" y "Annie"-. "Se trabaja durante bastantes horas y hay que coordinar a muchas personas, pero ha sido muy gratificante".
Costo
Según datos de la producción, montar un musical de esta envergadura cuesta alrededor de US$ 2 millones.
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